Hagas lo que hagas, ¡no toques tus granos!
Sabemos lo tentador que puede ser un pequeño grano en la frente o en la punta de la nariz, y lo difícil que es resistir las ganas de reventarlo para hacerlo desaparecer. Aunque parezca la mejor opción, lo cierto es que apretarlo puede ocasionar problemas mayores y que tardarán más en irse.
Los granos no son más que concentraciones de bacterias dentro de un mismo folículo de piel. Al reventarlos, lo que hacemos es repartir estas bacterias por nuestra cara, nuestras manos, y cualquier cosa que toquemos. Si quieres eliminar una espinilla, utiliza una crema adecuada: es más higiénico y mucho más seguro.